Sentencia condenatoria para tres policías en Siguatepeque
Tegucigalpa, Francisco Morazán. La Fiscalía Especial de Derechos Humanos (FEDH) logró una sentencia condenatoria contra tres efectivos policiales por el delito de Homicidio en su grado de ejecución de tentativa en perjuicio de dos testigos protegidos.
En el Juzgado de Letras Seccional de Siguatepeque se llevó a cabo el Juicio Oral y Público en donde se sentenció a Jorge Leonel Oliva Baca y Jaime Agenor Llanos Moncada por el delito de Homicidio en su grado de ejecución de tentativa y contra José Miguelin Hernández por el delito de Complicidad de Homicidio en su grado de ejecución de tentativa.
En las investigaciones realizadas por la FEDH se destaca que el sábado 21 de agosto de 2010 se desarrollaba una fiesta bailable en la aldea “Jardín de Taulabe” en Siguatepeque, a la 01: 15 horas de la madrugada se recibió una llamada donde se comunicaba que en la fiesta estaban dos grupos de personas haciendo disparos por lo que de inmediato salieron en la patrulla los tres agentes mencionados.
Antes de llegar al lugar de la fiesta, testigos observaron un vehículo que estaba estacionado y al ver la patrulla policial arrancó a toda velocidad dándose a la fuga, posteriormente los testigos también observaron un vehículo que venía en sentido contrario hacia donde se conducían ellos, del vehículo empezaron a disparar impactando en la puerta de la patrulla por lo que también los agentes empezaron a disparar.
Luego salieron en persecución del vehículo encontrándolo accidentado unos 50 metros adelante, en el interior del carro encontraron a tres personas heridas y un arma de fuego calibre 38.
Uno de los heridos manifestó que cuando se subieron a la camioneta le hicieron tres dispararos en la espalda y cuando se bajaron los policías los agarraron a patadas y perforaron el vehículo a disparos: además mencionó que lo único que querían era escaparse para que no los mataran ya que habían tenido problemas con unos muchachos en la fiesta y no sabían quién los iba siguiendo.
En relación a los seis disparos que presenta el vehículo donde se conducían los ofendidos según el dictamen del Departamento de Balística no son disparos para detener a las personas sino que iban dirigidos a los cuerpos de los mismos en comparación a los dos impactos de bala que presentaba la patrulla de la Policía Preventiva.