Fiscalía del Ambiente busca individualizar responsabilidad penal por incendio en Corralitos, zona de amortiguamiento de La Tigra
Tegucigalpa, Francisco Morazán. Tras haber iniciado en horas de la madrugada de amanecer el lunes, la Fiscalía Especial de Medio Ambiente (FEMA) y un equipo multidisciplinario investiga el último incendio que se suscitó en la zona de Corralitos, mismo que se extendió a Cofradía, Limones y otros sectores aledaños.
Luego, que parte de donde se originó el incendio se sofocara, un equipo compuesto por un fiscal, técnicos de Fema, personal de las Fuerzas Armadas (FFAA), Instituto de Conservación Forestal (ICF), entre otros, llegaron al sitio para inspeccionar y recoger futuras evidencias para individualizar la responsabilidad penal por el siniestro, que elementos de la Fuerza Aérea Hondureña (FAH) y Cuerpo de Bomberos, todavía ayer intentaban combatir desde el aire y tierra, sin embargo se espera se extinga totalmente por la lluvia de esta tarde-noche de jueves.
Los técnicos del ICF, estiman que hay alrededor de 600 hectáreas de bosque afectadas, por lo que una vez apagado en su totalidad, la labor de georeferenciar el mismo será muy extensa, pese a la ayuda de un dron del ICF, el que ayudaría para el levantamiento de datos con mucha precisión.
Fiscales recogieron elementos e indicios probatorios con los que se busca llevar a los tribunales a la o las personas causantes del incendio en este sector de la reserva, desde el que se recolecta casi un 30 por ciento del agua potable que consumen los ciudadanos del Distrito Central.
La FEMA hace un llamado a la ciudadanía para que denuncien a través del 911 los incendios forestales, pero sobre todo para que colaboren con las autoridades a identificar a los pirómanos.
La ley actual establece que el delito de incendio forestal contempla una pena de 6 a 12 años de reclusión y el de daños agravados 3 años de reclusión.