Roatán, Islas de la Bahía. – Se decretó fallo de culpabilidad en audiencia de juicio oral y público en la causa instruida contra Juliza Indiana Moya Brown (35), acusada de parricidio por matar a puñaladas a su compañero de hogar, Jeffrey Don Gittelson.

Los hechos ocurrieron el 14 de abril del 2020, aproximadamente a las 11:00 de la noche, en la casa de habitación que compartía con su pareja, la ahora condenada Juliza Indiana Moya Brown, ubicada en un sector de Coxen Hole, Roatán.

Cuando Jeffrey Don Gittelson llegó a dicha vivienda, sostuvo una discusión con su pareja, siendo agredido por la señora, quien le infirió dos heridas de arma blanca, una de ellas en la yugular que le causó la muerte minutos después de ser atendido en un centro hospitalario de la isla.

La pareja había mantenido una unión libre por un periodo de 12 años. Se presume que tenían problemas maritales desde hacía algún tiempo y ese día, iniciaron una pelea que terminó con la vida de Jeffrey Don Gittelson.

Poco tiempo después de lo ocurrido, aproximadamente a las 12:45 de la madrugada, la mujer fue detenida por la agentes de la Policía Nacional. Al momento de ser requerida, se le decomisó una calzoneta y un arma blanca, cuya comparación de ADN que se hizo posteriormente, resultó ser positiva.

Según el nuevo Código Penal vigente, en el artículo 194, por el delito de parricidio, “quién mata a alguno de sus ascendientes descendientes a su cónyuge o persona con la que el agraviado mantenga una relación estable de análogo naturaleza al anterior, debe ser castigado con la pena de prisión de 20 años a 25 años”.