Tegucigalpa, Francisco Morazán. – La Fiscalía Especial de Medio Ambiente (FEMA), ha obtenido autos de formal procesamiento en dos casos distintos por delitos ambientales.

En el primer caso, Carlos Luis Salgado Alonzo y Daniel Antonio Alfaro Sánchez enfrentan cargos por el supuesto delito de corte y aprovechamiento sin fines comerciales. La investigación se remonta al 26 de febrero de 2019, cuando una patrulla recibió un reporte de tala de árboles en la aldea San Juancito, Francisco Morazán.

Al llegar al lugar, los oficiales escucharon el sonido de una motosierra y encontraron a Salgado y Alfaro. Cuando se les preguntó si tenían los permisos necesarios para realizar la actividad, ambos confesaron no tenerlos, lo que llevó a su detención y posterior presentación ante las autoridades correspondientes.

En el segundo caso, Roberto Adolfo Flores Servellón ha sido acusado de explotación ilegal de recursos naturales. El 27 de abril de 2022, en el municipio de Lepaterique, Francisco Morazán, personal de la Unidad Municipal Ambiental (UMA), detuvo un camión color banco, placa AAB-0808 que transportaba siete trozas de pino.

Flores Servellón, quien dijo ser el dueño de la madera, presentó una licencia de aprovechamiento no comercial. Sin embargo, en el documento se especificaba que la madera no podía ser vendida o permutada, ya que supuestamente sería utilizada para mejoras en su propia vivienda ubicada en Oropule, Lepaterique.

El dictamen de la Sección Técnico Ambiental (STA) de la FEMA, reveló que la madera decomisada ascendía a 1557.33 pies tablares, lo que equivale a 7.79 metros cúbicos de madera ya procesada.

La licencia comercial firmada por el procesado indicaba que cualquier incumplimiento de las normas técnicas y legales lo haría responsable de las faltas y delitos derivados. A otra persona también se le dictó auto de formal procesamiento por este caso.